Pedir un aumento de sueldo suele aparecer en momentos clave de la carrera, al entrar a un nuevo cargo, en las evaluaciones anuales o al asumir más responsabilidades, pero no siempre se concreta. Con evidencia de Buk, esta nota describe cómo se negocia en cada país, qué cambia según la etapa (al recibir la oferta o una vez dentro de la empresa) y qué factores inciden en los resultados.
La mayoría no negocia ni al firmar la carta de oferta ni cuando ya acumula tiempo en el puesto. En Work in Progress 2024 (más de 4.700 respuestas en LATAM), solo 1 de cada 4 declaró haber negociado su sueldo al momento de ingresar a un empleo.
A pesar de que la compensación es un factor clave en la elección de un empleo, los datos revelan que muchos trabajadores desaprovechan las ocasiones disponibles.
Para entender por qué ocurre esto, en los estudios Work in Progress de 2024 y 2025 pedimos a las personas que eligieran los tres aspectos que más valoran de un empleo. El “Salario e incentivos monetarios atractivos” se ubicó en el primer lugar en 2024 y en el segundo en 2025. Específicamente, el 30% y el 41% de los encuestados, respectivamente, lo incluyeron entre sus tres prioridades principales.
Dado lo relevante que es el salario como característica deseable, ¿Por qué los trabajadores no son más proactivos para negociar un aumento de sueldo? En este artículo, presentaremos datos sobre el número de solicitudes en distintos países de Latinoamérica y sus tasas de éxito. A partir de los resultados, te diremos qué acciones específicas pueden ayudarte a conseguir una mejor negociación.
La negociación del salario inicial es un momento clave en la carrera profesional. Múltiples estudios demuestran que es en esta etapa cuando los candidatos tienen más influencia, ya que los empleadores están más dispuestos a mejorar la oferta para asegurar la contratación de la persona adecuada.
Para las empresas, mantener un puesto vacante genera costos significativos en pérdida de productividad, retrasos y horas extras. Esta situación se agrava si no se logra contratar a un candidato ideal ya evaluado. Por eso, muchas organizaciones presentan una oferta inicial con margen para negociar, anticipando un posible ajuste posterior. De hecho, un artículo de la SHRM (Sociedad para la Gestión de RR.HH) indica que cerca del 90% de las empresas encuestadas están abiertas a negociar el salario de sus ofertas.
Los datos de la encuesta Work in Progress 2024 revelan que, a nivel global, el 74% de los colaboradores no negocia su salario al inicio. Sin embargo, Perú destaca por ser una excepción: con un 31.9% de los trabajadores que negocia en esta instancia, el país tiene la mayor propensión a negociar de toda la muestra.
Para reiterar lo que se ha dicho, la tasa de éxito de las negociaciones de oferta es alta. Considerando el total de negociaciones, el éxito general alcanza un 84% según los datos de WIP 2024. En el caso de Perú, esta cifra fue de 83.3%, un resultado muy cercano al promedio de la región.
Una vez que un colaborador se integra a la empresa, y ya se tiene evidencia de su desempeño, se presentan nuevas oportunidades para negociar un aumento de sueldo. Estas conversaciones suelen ocurrir durante las evaluaciones de desempeño o cuando se asumen nuevas responsabilidades.
A diferencia de la negociación inicial, el espacio para el aumento puede ser más limitado debido a las bandas salariales internas y a los presupuestos anuales de la organización. Los datos de las encuestas Work in Progress 2024 y 2025 revelan un cambio interesante. En 2024, el 34.3% de los colaboradores solicitó un aumento, cifra que disminuyó a 27.2% en 2025. Sin embargo, la tasa de éxito de estas solicitudes aumentó significativamente, pasando del 38.9% al 57.3%, un notable incremento de 18.4 puntos porcentuales.
Como resultado de este mayor éxito, la proporción total de aumentos salariales sobre el total de encuestados subió de 13.3% a 15.6%. En resumen, menos personas pidieron un aumento en 2025, pero quienes lo hicieron tuvieron más éxito, elevando así el resultado global.
Con base en la información de Work in Progress 2024 y 2025 (mostrada en la Figura 4), evaluamos las tasas de éxito de las solicitudes internas de aumento de sueldo en cada país. Perú se ubica como el país con la tasa más baja de negociación, registrando un 31% en 2024 y un 53.7% en 2025 al momento de buscar un aumento dentro de su organización.
Los datos demuestran una vez más que la negociación salarial es más exitosa al inicio de un empleo que una vez dentro. La tasa de éxito en la oferta de trabajo inicial fue del 84%, mientras que el éxito de los aumentos internos promedió 39% en 2024 y 57% en 2025. Esta importante diferencia puede explicarse por el salario base que se fijó al entrar, por las restricciones presupuestarias y por la rigidez de las estructuras salariales y los calendarios de revisión.
La decisión de buscar un aumento de sueldo y el éxito en esa gestión varían considerablemente según el perfil de cada persona. El estudio “Radiografía de las Mujeres en el Trabajo 2025» confirma que, por lo general, los hombres solicitan un aumento salarial con un poco más de frecuencia (35%) que las mujeres (33%).
Si bien las diferencias en la frecuencia con la que se solicita un aumento son pequeñas, la brecha más preocupante se encuentra en los resultados. Tras pedirlo, la tasa de éxito de los hombres supera a la de las mujeres en 12 puntos porcentuales. Esta disparidad se agrava entre padres y madres, donde la distancia se amplía a 17 puntos porcentuales , lo que convierte a las mujeres con hijos en el grupo con la menor probabilidad de conseguir el aumento.
El estudio también revela que estas diferencias en el éxito de la negociación se deben a factores estructurales y culturales. Entre ellos se encuentran los sesgos que afectan a las mujeres con hijos, la percepción de un menor compromiso de su parte y la carga desproporcionada de trabajo doméstico y de cuidado, que impacta directamente en las evaluaciones de desempeño y las decisiones de promoción.
Aprovecha los datos de este artículo para fortalecer tu posición al negociar.
Para seguir ampliando estos conocimientos y contribuir a la evidencia futura, te invitamos a participar en nuestros próximos estudios. ¡Sé parte de la comunidad de Buk y ayúdanos a construir más datos sobre el mundo laboral aquí!